25 octubre, 2007

Supermodelos sangrantes en el matadero

Me ponga cuarto y mitad de supermodelo«(...) En esta escuela televisiva no se promociona la moda, pero sí se machaca una carne cada día más sumisa. Carne joven y pura, que es la que más cotiza. Luego vendrán los pinceles, las pelucas, los corsés y los tacones que convertirán a la virgen en puta. Los sentimientos deben parecer reales; la pose, confundirse con una prolongación del alma. Pero sólo la angustia es real, el rictus esquinado de quien trabaja en ayunas. Ser modelo es una profesión; ser bella o fotogénica es una suerte, pero ser una malparida maltratadora de ninfas no es de recibo. Y en mitad de este baile de histerias, la de los fotógrafos, la de los estilistas y la de las niñas, una llamada a casa, qué alivio. Por desgracia mamá también es idiota, y te dice que aguantes, que el que algo quiere algo le cuesta, y que el valor más rentable -a la larga- es la capacidad de sacrificio. Mamá pierde el norte y se olvida de que la niña, que además de guapa estudia medicina, es mucho más que barro moldeable en manos de un bobo con pajarita. Y la anima a seguir, a posar y cerrar el pico. Al pesado y al medido. Al control de calorías. A la sobreactuación llorona. El show sigue ante mi estupefacta mirada, sumando adolescentes que, semana tras semana, contemplan fascinadas esta doma de potrillas.(...)»

Sigue en:
Domadores de lolitas
21 octubre, 2007

Tristeza post porno

Hans Bellmer: Vanidad. Pincha para ampliar
«Dice un conocido de un amigo que no me cae bien en realidad, que cuando se la casca por quinta vez viendo porno que en realidad no le pone, solo que es como el perro de Paulov y al ver porno=paja, dice este guarro que al final del todo, cuando te acabas el juego de las pajas y matas al monstruo fin de fase, acabas viendo el sexo como algo estúpido y sinsentido, y ves un trozo de carne entrando y saliendo en un trozo de carne sin ningún tipo de sentido. Y si permaneces con la boca semiabierta el suficiente tiempo empiezas a ver cómo una luz, pequeña al principio, juguete por dentro, platano es, empieza a crecer justo en la juntura de los fornicadores.

"¿Y entonces, qué? ¿Viste a dios? ¿Escapaste del sansara? ¿Aborreces desde entonces la esclavitud de la carne?"


No. Entró mi madre y me dijo "¡¿Qué haces nene?!", y yo le dije "¡¡Jo mamá, es que me picaba mucho!!".

Tristemente basado en hechos reales.»
Sexo

Last.fm Tumblr

Comentarios recientes

Blogroll